Evangelizar es anunciar las buenas nuevas con amor, fidelidad y valentía, llevando la luz del evangelio a los perdidos. Cada encuentro es una oportunidad para sembrar la Palabra que transforma corazones.

El apóstol Pablo declara con valentía que no se avergüenza del evangelio porque es poder de Dios para salvación. Este pasaje revela la esencia del mensaje cristiano y la urgencia de compartirlo.

El evangelio no es un consejo humano, sino una obra divina que transforma vidas.

Pablo escribe a una comunidad mixta de judíos y gentiles en Roma, donde la predicación del evangelio podía traer rechazo y persecución.

El evangelio revela la justicia de Dios y ofrece salvación a todo aquel que cree.

Aplicación Práctica para nuestra fe, vida y conducta

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Evangelizar implica proclamar esta verdad con firmeza, sin temor a la oposición, confiando en el poder de Dios y no en la elocuencia humana.